Blanquear los huesos de res: hervir con agua fría durante unos 5 minutos, luego escurrir. Enjuagar los huesos de res, volver a cubrirlos con agua fría fresca y dejar cocer a fuego lento durante unas 2 horas.

Cortar las verduras para sopa en trozos grandes, sin pelar, y añadir.

Después de 2 horas, dorar la mitad de la carne picada sin grasa adicional y añadir al caldo.

Dejar cocer el caldo a fuego lento durante otros 30 a 60 minutos para obtener aún más sabor.

Luego, colar a través de un tamiz y reservar el caldo claro. Guardar la carne que queda en el tamiz.

Preparación de otros ingredientes:

Quitar las semillas al pimiento y cortarlo en tiras.

Cortar los champiñones en cuartos.

Quitar el tallo al pak choi, pero dejarlo entero.

Batir los huevos y salar ligeramente.

Cortar finamente el chile.

Pelar y rallar el ajo y el jengibre.

Cortar las cebolletas en aros.

Tener listos los brotes de soja mungo.

Calentar aceite en una olla. Añadir los huevos batidos y dejar que cuajen (¡no remover!). Luego, retirar y cortar en tiras.

Dorar brevemente el pak choi en la misma olla y retirar.

Dorar la carne picada restante en la misma olla.

Añadir el pimiento y los champiñones uno tras otro.

Añadir el ajo rallado y el jengibre y sofreír brevemente.

Añadir el chile y tostar brevemente también.

Añadir la carne colada a la olla, añadir también las tiras de huevo y mezclar todo bien.

Verter el caldo preparado y llevar a ebullición.

Sazonar con un chorrito de salsa de pescado y sal.

Añadir los fideos a la sopa caliente y dejar reposar durante 2 minutos (¡no cocer más!).

Servir la sopa en cuencos, decorar con cebolletas, brotes de soja mungo, cilantro y un poco de aceite de sésamo.

Consejo: La sopa se puede adaptar maravillosamente a tu gusto – más picante, más verduras o un huevo cocido suave como aderezo la hacen aún más versátil.

¡¡¡Buen provecho!!!